La experiencia del cruce
El cruce del pasaje de Drake suele demorar 48 horas y es una de las grandes experiencias de viajar a la Antártida. Aunque en ocasiones son travesías tranquilas, el clima es impredecible y el oleaje suele ser fuerte pudiendo generar malestar en algunos pasajeros, sobre todo los primeros días (todos los barcos ofrecen servicio médico para asistir en estos casos).
Durante el cruce también se atraviesa la Convergencia Antártica, el límite biológico donde comienzan formalmente las aguas antárticas.